De la rica cultura oriental y japonesa proviene el Reiki, creencia cada vez más extendida en el mundo occidental. La palabra,compuesta por el vocablo Rei ( energía del universo) y Ki ( energía vital) resume la relevación de que todos los seres estamos conectados por la energía universal y que cuando esta fluye libremente a través de nosotros experimentamos salud y bienestar porque se produce esa energía vital (Ki) dentro de nosotros.
El Reiki significa entonces, en pocas palabras, una fuente ilimitada, infinita e inagotable de energía que se expresa en la sabiduría divina, la compasión y fundamentalmente en el amor. Por esa razón sus beneficios son ilimitados y su propia naturaleza nos lleva a armonizar, ordenar, purificar y devolver la perfección natural a cualquier condición o situación sobre la que se invoque su presencia.
Con la llegada del Reiki a la humanidad completa, integrando oriente y occidente, llega también el tiempo de ayudarnos unos a otros y sobre todo de ayudarnos a nosotros mismos brindándonos la oportunidad de experimentar armonía plena y abundancia donde sea que estemos, irradiando generosidad y plenitud a los demás.
La sanación de la imposición de las manos
MIkao Usui, quien era un monje cristiano de mediados del siglo pasado, redescubrió la espiritualidad y el método Reiki. Lo hizo, cuando buscaba la respuesta a la pregunta de cómo curaba Jesús. El monje investigo muchos escritos cristianos, chinos e indios y en ellos diferentes símbolos, fórmulas y métodos de curación utilizados por el mismo Buda. Estos hallazgos permitieron la sistematización de lo que hoy es el REIKI y la forma de llevarlo a la práctica. .En la actualidad el REIKI nos permite vivir en armonía con lo que nos rodea porque es un método efectivo de sanación, auto-sanación y equilibrio bioenergético entre nosotros y nuestro alrededor.
La curación es lograda por medio de la transmisión de la energía universal sanadora a través de la imposición de las manos (y el dibujo de unos símbolos que conoce el maestro que te inicia en tu sanación). Es efectivo tanto en personas como en animales y plantas
La terapia de la imposición de las manos puede realizarla una persona o puede hacerse en grupo y la misma se ejecuta en varias posiciones que están relacionadas con los centros energéticos y los chakras. Estas posiciones duran cinco minutos. Es necesario que las personas que se sometan a la terapia la acepten libremente y en actitud de armonía ayudada por música inspiradora, ambiente de relajación y aromas agradables como el incienso.
No es necesaria la presencia física para obtener los beneficios del Reiki. Se puede hacer a distancia por medio de la técnica japonesa Enkaku Chiryo que permite enviar energía curativa a personas y seres vivos que se encuentren en cualquier parte del mundo.
Los niveles de iniciación, el sanador y el Reiki a distancia
Los niveles de iniciación del Reiki son tres; el primero consiste en la sanación principal o fundamental que realizas contigo mismo y en tu propio cuerpo físico. Cuando pasas al segundo nivel ya eres un sanador y puedes enviar Reiki a distancia, a través de la mente (puede ser con una foto de alguna persona o simplemente con el nombre de una persona por escrito). El tercer nivel se centra en la sanación del espíritu.
Sucede que mientras vamos envejeciendo o avanzando en edad vamos bloqueando canales internos que dificultan que la energía Rei circule dentro y a través de nosotros. En cambio el sanador tiene los canales abiertos para que circule la energía y precisamente para lograr eso, lleva a cabo los tres niveles de iniciación.
Nadie que reciba el Reiki puede ser perjudicado por que su finalidad es lograr la armonía, el amor e irradiar la luz. Es puro espíritu y energía que apela a la naturaleza de cada ser, a su conciencia original. Nos devuelve nuestro equilibrio natural.
Las escuelas; iluminación, guías angélicas y alma gemela
Son principios conocidos del Reiki frases tales como “No te preocupes por hoy”, “Honra a tus padres, maestros y ancianos”, “Gana tu vida honestamente” o “Expresa gratitud a todos los seres vivos”.
Gracias a sus virtudes y resultados, hoy este método se encuentra en constante expansión y existen una gran variedad de escuelas especializadas aunque conserven la misma raíz en esencia.
Son escuelas conocidas del Reiki las que trabajan con “los siete rayos” que ofrecen herramientas para agrandar la iluminación, lograr la ascensión y expandir nuestra conciencia de forma trascendental. Otras escuelas potencian la conexión con nuestra propia conciencia, la apertura del corazón y su sanación a profundidad e incluso contempla la ayuda con guías angélicas. Otras trabajan con las almas gemelas para que puedas visualizar “tu pareja cósmica” o también llamada “llama gemela” y disminuir los bloqueos que te impiden encontrarla. Otros hacen énfasis en el sistema energético de quienes lo practican para lograr la apertura hacia la luz divina y la unión con la madre tierra. Unas aplicaciones del método ayudan a superar traumas de vidas pasadas e incluso traumas provocados durante el nacimiento. Este método ancestral también se aplica en la actualidad para trabajar directamente el ADN de las personas, incluso para tratar inflamaciones y fiebres.
Por todas estas razones el Reiki se expande con alta velocidad en ambientes sanitarios y terapéuticos abiertos e interesados en mejorar la calidad de vida de los pacientes y su recuperación.